Cómo elegir el primer juguete erótico para potenciar tu sexualidad

¿Principiante en el mundo de la juguetería y cosmética erótica? Entonces te invitamos a leer esta nota y a seguir nuestros consejos. 

“Porque eres el amor de mi vida, me lo dice mi corazón que no te olvida…”  ¿se acuerdan de esa pegajosa canción romántica y media cebolla de Ricky Martín, esa, la que lo llevó a la fama con su pelo largo, su rostro perfecto y cuerpo de Adonis? Es como de los años ‘90 y sí, ya sé, se me cayó el carnet. Pero a penas supe que iba a escribir una nota sobre cómo comprar el juguete ideal o el más idóneo para un@, se me vino de inmediato a la mente este tema musical. 

Bueno, volviendo a lo nuestro, recuerdo perfectamente el día que decidí ir por mi primer juguete sexual. En ese tiempo no era muy común comprar por internet, así que no quedaba de otra, que ir hasta a una tienda física, y a cara descubierta, entrar, vitrinear por esos pasillos medios oscuros, llenos de consoladores realísticos de dimensiones XL, llenos de venas y con un discreto apartado para productos que se veían menos gigantes y más amigables. 

Fue ahí que - casi de manera instintiva - me detuve y vi un vibrador de un tamaño que me acomodaba, lo tomé y le dije al vendedor que me interesaba comprar ese o algo que se pareciera. Quien me atendió yo creo que se sentía igual de incómodo que yo. Eran otros tiempos, era el Chile de hace más de una década donde la palabra “vagina” era considerada impropia para decirla en televisión abierta y se cubría con un poco sutil “piiii” cuando a alguien se le ocurría pronunciarla. Así que rápidamente me dijo que tenía 4 velocidades, que rotaba, que usaba dos pilas triple A y que se lavaba con agua y jabón. Fin.  En ese momento, pensaba que era suficiente información. Hoy sé que no es así y que es por eso que en Starsex hacemos la diferencia, porque no solo vendemos, sino que asesoramos, guiamos a nuestros clientes no hacia lo que queremos vender, sino que a lo que la persona necesita o anda buscando, en especial, si es su primera vez. 

El asunto es que el producto me generó varias sorpresas, todas buenas, pero las tuve que descubrir solitas, por ejemplo, quien me vendió el producto nunca me dijo que era maravilloso porque además de vibrar también rotaba ¡OMG! nunca había experimentado eso. Me habría gustado un poquito más de empatía y de guía. Así que por lo mismo, para ustedes, personas con vulva, personas con pene que nunca han comprado nada en un sexshop y que necesitan una guía, acá les dejamos unos tips desde nuestra experiencia - que data de hace más de 15 años - para que puedan llegar al juguete o al producto ideal y perfecto PARA TI. 

1- Reflexiona o piensa sobre qué tipo de estimulación te gustaría experimentar. Puede ser vaginal, anal, del clítoris, pezones, pene, testículos, cuerpo entero… si te gustaría algo interno (que se introduce) o externo para empezar, no te pongas límites y recuerda que el sexo no es solo genitalidad, nuestro cuerpo es la zona erógena más extensa que tenemos. Y otra cosa muy importante: ¡los juguetes sexuales NO tienen género! no es que algo sea para mujer y otra para hombre. Por ejemplo, un vibrador, perfectamente puede usarse  para estimular un pene y una funda para pene la podemos ocupar para estimular un clítoris ¿qué tal? 

2- Con esa idea, navega por la web. La gracia es que hoy tenemos acceso a mucha información por internet y las tiendas de sexhop virtuales. Date el tiempo de buscar los productos que hay en el mercado, ¡te sorprenderás! te lo aseguro, ya que hay allá afuera cosas que harán que estalle tu cabeza y de seguro algo más… 

3- En estos casos no hay preocuparse por los tamaños. Si te encuentras con un dildo gigante esto no te asegura que tu placer o tu orgasmo vaya a ser igual o más que una mini bala vibradora. Todo depende de la potencia, de lo que andes buscando, de tu cuerpo, de tus puntos sensibles, de tantas cosas… que en verdad te sugiero que no tomes en cuenta los centímetros de más o de menos a la hora de decidirte por un producto. 

4- Si es que estás buscando un producto para usar en pareja, te aconsejamos que incluyas a la otra persona ya sea para comprar el artículo erótico, en el vitrineo o al menos en la idea. Y si estás buscando algo solo para ti, por favor, no andes pensando que no te quedó de otra que buscar algo así, ya que estás sin pareja, ni te imagines que mientras te masturbas, te están rodeando los 10 gatos de solterona o de solterón etc. Saca todas las etiquetas de tu vida, llegaste a este mundo para ser feliz y sentir placer ¡punto! 

5- Si te gusta lo real, ustedes saben, esas reproducción de penes de tamaño real (o hiper real) con harta vena y hasta testículos incluidos ¡dale! si te gusta la fantasía, ese dildo de color chicle, con carita feliz, con orejas de conejos o con forma de unicornio ¡dale! Si te gusta eso de látex, con látigo y segadera, ¡dale! si te tinca el plug anal ¡dale! No te preocupes por lo que la mayoría usa o está de moda. 

6- Pregunta hasta que no te queden preguntas. Esto es súper importante, si te vas a asesorar, entonces asesórate, pregunta por el material de qué está hecho el producto, cuál es el más idóneo, si el producto cuenta con certificación o no, cómo se lava, cuáles son sus cuidados, cómo se usa, cómo se puede usar, cómo no se usa, si es o no resistente al agua, si usa pilas o se carga con puerto usb etc etc. 

7- No subestimes el poder de un buen gel excitante o lubricante. Quizás se ven muy inocentes en sus envoltorios pequeños, pero ese líquido puede generar sensaciones que nunca antes has vivido, hay unos con sensación de calor, frío, de vibración, otros con sabor, aromas, ideales para el sexo oral, otros para el sexo anal. La gracia de estos productos es que despiertan nuestros sentidos.   Además, y esto es súper importante, TODOS LOS JUGUETES, se usan con lubricantes íntimos. 

8- Puedes invertir una buena suma de dinero cómo puedes invertir una módica suma de dinero en tu primer juguete, eso lo decides tú. Pero sí te queremos contar que no es necesario endeudarse para conseguir ese juguete o ese producto que te lleve a ver la luna y las estrellas. Todo va en un buen asesoramiento y en tu disposición a probar y explorar. 

9-Debes tener paciencia y  aprender a lidiar con la frustración. Piensa en que al menos acá en Chile tod@s tenemos nula educación sexual, venimos de una cultura coitocenrtista en que se nos enseña que sexo es sinónimo a penetración, venimos de una cultura falocentrista donde todo gira en torno al pene y su rendimiento. Así, si eliges un producto y de pronto sientes que no te generó lo que esperabas, entonces vuelve por otro y explica por qué no te satisfizo del todo. No te des por vencid@ y asesórate bien. 

10- Normaliza el uso de juguetes sexuales y cosmética erótica en tu vida. Si bien algo hemos avanzado en estas lides, aún queda mucho por hablar, por comunicar, por reformar. ¿Cómo hacerlo? habla de que tienes un dildo en tu velador, como quien cuenta que siempre coloca un vaso con agua en su velador por las noches. Así de natural debiese ser el hacerse cargo de la sexualidad. 

Por Jessica Ramos Valenzuela